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«Un punto de vista distinto», por Andrés Llames

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Acabo de hablar por teléfono con un buen amigo que está planeando ya sus vacaciones de verano y al comentarme que ya se ha recorrido todos los lugares de España donde puede ir, me río.

– Estar en una silla de ruedas no tiene tanta gracia.

Después de un buen rato al teléfono hablando del tema, me doy cuenta que La Manga y Cabo de Palos no son para nada amigables.

Aceras con unos baches donde cabe una rueda entera, bordillos muy altos y aceras muy estrechas. Sumideros que es mas fácil rodearlos que saltarlos. Las plazas de aparcamiento delimitadas, están donde cuadran, no donde se necesitan. Las entradas a los edificios, no tienen rampas, o si las tienen, son para “escaladores” (“Mas de una vez me he encontrado con acceso para sillas de ruedas después de un escalón”).

Y todo esto sin contar con las personas con visibilidad reducida. ¿sabías que el relieve que hay en las zonas de los pasos de peatones son para ayudar a las personas con visibilidad reducida?

Aunque, en el caso de La Manga y de Cabo de Palos, la mayoría de los pasos de peatones no tienen este sistema, y no hay casi ningún semáforo con el aviso acústico que indica cuando se puede cruzar. Ni siquiera el transporte público esta adaptado.

Ante la vergüenza que me daba el no haberme fijado nunca en estos detalles, intenté cambiar de tema e intentar convencerle de que no estábamos tan mal.

– Tenemos multitud de Playas con Q de Calidad y con accesos para sillas de ruedas. – le dije.

Ahí fue donde se rió él.

“Las Q´s de Calidad están muy bien como un principio, igual que las Banderas Azules, aseguran que el agua está limpia, que tienen salvamento, que la empresa que mantiene la playa cumple unos requisitos,… pero, en la parte que nos compete no tiene ni un sólo punto real. Las payas que dicen tener acceso para personas con movilidad reducida, o están a nivel de la carretera o, como mucho, poseen una rampa de acceso, ¿y luego qué? O te vas con una silla todo terreno, o te quedas anclado en la arena al final de la rampa. Las sillas anfibias están muy bien, pero están pensadas para gente mayor que necesiten ayuda. Yo no tendría por qué necesitar esa ayuda si las pasarelas llegaran al agua.”

“Uno de los motores económicos mas importantes que existen en la zona, es el Buceo, pero hacer snorkeling en Cala Fría o en cualquier otra es casi imposible, para todos, tampoco creo que los servicios de emergencia puedan llegar bien a pie de playa, porque si nosotros no podemos llegar, ellos lo tienen muy difícil.”

Para terminar, me doy cuenta que hay tramos del carril bici que es intransitable, ya que el asfalto está levantado e incluso hay Palmeras en medio del carril, coches aparcados, zonas en las que es complicado maniobrar y en casi todos los cruces, el carril bici se acopla al cruce y hace muy difícil su circulación.

Escribo esta carta con la intención de que quien la lea, se de cuenta que si se hacen las cosas bien, se conseguirá que un amplio sector de la población deje de ser dependiente, y que si vuelve a haber otro Plan de Competitividad Turística en La Manga o en Cabo de Palos se aprovechen estas palabras para realizar las próximas obras para todos.

Sobre todo, escribo esta carta para la desaparición de las palabras “Adaptado” y “Accesible”, ya que en una sociedad responsable todo estaría Adaptado y sería Accesible.

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Sobre La Voz de La Manga

Redacción de La Voz de La Manga.

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